Espeólogo Grupo de Santo Domingo.
La Cueva no 1 presenta tres aberturas de acceso, siendo la más utilizada, tanto por los grupos aborígenes como por los grupos históricos y modernos, la entrada que se abre hacia el oeste (la que llamaremos entrada “A”). Otra entrada (“B”) se abre a 30 m al Norte de la entrada “A”, pero evidencia haber sido poco utilizada. Actualmente se encuentra algo cubierta y disimulada por la vegetación.
Accediendo por la entrada “A”, encontramos un conjunto de bloques que quedaron en el piso de la cueva como resultado de la disolución de los estratos a que pertenecían, y que construyen a dividir este primer gran salón de la cueva en dos salas que se extienden, una (nombrada Sala de las Penumbras) hacia el noroeste, y la otra hacia el Suroeste. El punto en donde convergen ambas salas se le conoce como la Sala de los Grandes Edentados. Estos nombres les fueron dados durante los trabajos de reporte de arte rupestre realizados por el Mueso del Hombre Dominicano (Pagan Perdomo 1978).
La cueva desarrolla un circuito circular que vamos a describir comenzando con la sala que se extiende al suroeste, y que se conoce como Sala Boinayel (dios taino de la lluvia). Esta sal mide 36m de largo por 18 m en su parte más ancha. A 15 m de la entrada de la cueva, el techo es bajo, por lo que presenta un lapso bajo en el que aparecen las primeras concreciones estalagmitas y de coladas, algunas de las cuales fueron aprovechadas para< el tallado de petroglifos indígenas. Más al interior de la sala, se aprecian concreciones mayores, como la colada que está en la pared, a unos tres metros sobre el nivel del piso. En el techo se parecían estalactitas y colgaduras activas que dieron origen acumulos estalagmiticos sobre os bloques deprendidos del techo por efecto de la disolución entre estratos. Esta sala esta también unida a la sala de os grandes edentados mediante un pasillo que pasa por detrás de un macizo columnar con apariencias de ser la resultante de una erosión diferenciada, aunque se parecía bastante bien que la constitución de ese macizo columnar es del mismo tipo de caliza en el que se abre la cueva.
La Sala Boinayel presenta dos espeluncas que se abren hacia el Noreste y una hacia el sureste, evidencia de la orientación misma de los grandes estratos en que se abre la cueva. En las dos primeras se encuentran decenas de pictografías Tainas.
La cueva continua con una galería que se extiende por unos 30 m, iniciándose con un techo muy bajo, y un piso cubierto por un gour” (ocasionalmente activo) de unos ocho metros de extensión. Son real aprte central del gour se eleva una concreción que marca el punto de nacimiento del gour. Sobre el gour hay una diferencia de nivel con el piso de la sala Boinayel de unos 80 centímetros.
Luego de esta particular formación no hay otras concreciones en la galería, la que se amplía según se extiende desde los 2.5 metros (final del gour) hasta los 4.7 metros, en parte más ancha al final de ella. Por igual, el techo es más alto, partiendo de los 1.1 metros (sobre gour) y elevándose hasta 4 metros casi al final de la galería, en la que aparecen también un buen numero de figuras antropomorfas y zoomorfas de origen Taino. Al final del gour, a la izquierda, baja una chimenea de aproximadamente te ocho metros de alto por dos metros de ancho, pero que no conduce a parte alguna de la cueva. Se trata de uno del os accesos por donde penetraba el agua y que fue cerrándose con el tiempo. Es evidente que el nivel del piso no es el natural. Aparte de la existencia de excavaciones practicadas en dos lugares de la galería; se nota la extracción de guano en las partes de este y casi todos los espacios de la cueva en donde hubo acumulación de murcielaguina, aunque es más evidente esta extracción en la sala de los grandes edentados y la sala de las penumbras.
La cueva continúa por un estrecho pasadizo al que se accede “a gatas” y que se encuentra sobre 1.8 metros del piso. A continuación se abre un gran salón nombrado Sala de las anguilas, y en el que se observa un caos de bloques y concreciones de muy variada forma y amaño. En este punto de la cueva, elevado cerca de seis (6) metros sobre el nivel inicial de la cueva, puede apreciarse claramente el efecto tectónico resuelto totalmente verticales. En este punto de fracturamiento el efecto de las aguas desaguo grandes bloques reduciéndolos y fragmentándolos.
El mismo proceso de fracturamiento dio origen a grietas que permitieron una copiosa filtración, dando origen, en consecuencia, a cientos de formaciones de dimensiones que van desde estalactitas y columnas de algunos centímetros, hasta concreciones y coladas columnares de varios metros de diámetro, erigidas tanto sobre el piso natural de la cueva, como sobre los mismos bloques. Este salón se extiende del Este al Noroeste por casi 60 metros, mientras que su extensión desde el suroeste al Noroeste es de unos 46 metros. Su punto más alto, con relación al piso natural del salón es de aproximadamente 4 metros, en tanto que el techo, desde el mismo punto bajo, se distancia unos 12 metros.
Orientada mas al S, la cueva se extiende por una estrecha gatera que lleva a otra galería un tanto tortuosa en la que se aprecia con toda claridad la disposición de los estratos calizos, unos sobre otros, pudiendo continuarse a través de un amplio intersticio estratificado hacia la Cueva No 2. Dicha gatera está alineada con la continuación de la cueva hacia el Norte, evidenciando la línea de presión ascendente que produjo el levantamiento y posterior fractura de los estratos de caliza.
Hacia el extremo Noroeste del salón en cuestión, se encuentra la Sala de los Murciélagos, donde el piso de la parte mas profunda y oscura del salón esta cubierto de murcielaguina. Además este piso se halla en un nivel interior, más bajo que el resto del salón, posiblemente al mismo nivel que el punto de entrada viniendo desde la galería descrita anteriormente. Junto a la pared oeste del salón, a aproximadamente cinco metros del piso, se encuentra una claraboya de aproximadamente 4 m 2, por donde es posible acceder a la cueva, y a la que podemos llamar C.
Continuando por el N, la cueva se extiende por una galería de casi 46 metros (hasta una pared), iniciándose en un intersticio de apenas 50 centímetros, que permite un descenso de unos 3 metros, y que luego va ampliándose hasta llegar a una pequeña sala de 10por 8 metros, con un piso inclinado que al llegar a la sala indicada, marca una diferencia de aproximadamente 2 metros de desnivel. La cueva describe entonces una curva hacia el Este, dejando atrás la estrecha galería conocida como Galería de las Garzas, para llegar a una amplia sala nombrada Sala de las Tinieblas, al que presenta una dimensión de 22 por 16 metros, esta sala presenta una notable efecto hacia la pared Noroeste, en la que se puede ver el efecto de disolución que dio origen a la cueva. En ese punto, la pared se presenta como un gigantesco “arabesco” que das al impresión efectista de una agresiva corrosión.
Hacia el Sur de la Sala de las Tinieblas, una espelunca lleva hasta un hueco en el piso que comunica inmediatamente con un nivel inferior que no es más que el nivel de la sala siguiente, conocida como Sala de la Ermita, y que se extiende por unos 230metros hasta una pared, y que es su parte más ancha es de 13 metros. Hacia el Noroeste de esta misma sala, se extiende una galería que en sus inicios es de 6metros de ancho, pero que se estrecha hasta unos 40 centímetros, para luego ampliarse y desembocar en la Cueva No 3. Luego de la sala de la Ermita, la cueva continúa por un estrecho pasillo, de menos de 1 metro de ancho, y poco más de un metro de alto, que se extiende por 6 metros hasta dar con la Sala de las Penumbras, que como dijimos, es la sala que junto a la de los grandes edentados, forma el salón de de entrada de la cueva no 1 en la sala de las Penumbras, adonde da acceso la Entrada b, hay dos extensiones; una hacia el Norte otra hacia el Noroeste. La primera, de aproximadamente 14 metros, se estrecha al terminar en una angosta espelunca. La segunda, una amara de 7 por 2 metros (en su parte mas ancha), es conocida como la Cámara de Schomborgk, su descubridor.
La sala de las penumbrosas tiene 26 metros en su pate más ancha, mientras que para llegar hasta la entrada de la cueva, deben caminarse 46 m, y completar así el circuito, sumando en total unos 254 m, pero en realidad su desarrollo, es decir, sumando todas sus extensiones, alcanza cerca de los 500 metros. Tanto en la sala de los grandes Edentados, así como en las salas de las penumbras, sala de al ermita y en la sala de al tinieblas, no abundan concreciones de ignorancia y belleza. Estas pueden encontrarse en el Salón de las Anguillas, y algunas en la Sala Boinayel.
Manifestaciones rupestres:
Todas las salas y salones de la cueva No 1 tienen en sus paredes, o en algunas de ellas de ellas, manifestaciones rupestres indígenas: pictografías y petroglifos.
Petroglifos: Los petroglifos son manifestaciones grabadas o esculpidas regularmente sobre concreciones. Estas suelen aparecer en las zonas de cuevas en donde llega la luz solar, aunque en ocasiones puede encontrárseles en zonas de penumbras y muy rara vez en zonas oscuras. En la cueva No 1, localizamos 11 conjuntos petroglifos, todos ubicados en el Gran salón (Sala de los grandes Edentados y Sala Boinayel) al que se accede por la entrada “A”. Los conjuntos suman 51 unidades, prácticamente todos de representación antropomorfa, lo que fueron medidos y reproducidos mediante calcos y fotografías.
Pictografías: a diferencia de los petroglifos, la pictografías (manifestaciones pintadas sobre superficie regularmente lisa y muy rara vez sobre concreciones suelen aparecer en cualquier sitio de las cuevas, tanto en paredes altas como bajas, dentro de grandes espacios o en pequeñísimas espeluncas. En la cueva No 1 hemos encontrado y catalogado 278 pictografías. Sin embargo, luego hemos detectado otras en algunos lugares recónditos de la cueva, por lo que pueden llegar hasta 300 manifestaciones pictográficas. Todas las pictografías han sido realizadas en negro, a simple vistas, utilizando una mezcla en la que predomina el carbón vegetal. Agrupadas por sus formas, las pictografías de la Cueva No1 fueron catalogadas en 9 conjuntos distribuidos en cinco áreas a lo largo de la cueva, y que en total contienen 158 representaciones zoomorfas, en las que predominan las aves con 154