Me quedé quieta en tu mirada
como manso río,
En tu vehemente pecho
como paloma.
En tus brazos como alondra,
anhelando la caricia.
En el pañuelo que guardo
escondido en los dobleces ...
que almacenan la esperanza
quiero encontrar
calidez en tu palabra
y esconderme tras tu piel
para no topar con tu silencio.
Stella
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Del poemario Fuego y Escarcha