México - Un día antes de presentar su renuncia como director general adjunto de Juegos y Sorteos en la Secretaría de Gobernación (Segob), Roberto Correa Méndez autorizó un permiso para abrir 41 centros de apuestas remotas con salas para sorteo de números. La empresa beneficiada fue Atracciones y Emociones Vallarta, S.A de C.V.
Esta compañía tenía el permiso para operar el Casino Royale de Monterrey, que sufrió un atentado en el que fallecieron 52 personas el 25 de agosto. Sin embargo, después de la tragedia se deslindó de las operaciones del lugar. Hasta ahora, la Segob investiga con qué permiso operaba el casino.
Correa Méndez fue nombrado director general adjunto de Juegos y Sorteos el 1 de enero de 2007, cuando estaba al frente de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña. El 11 de junio de 2009 presentó su renuncia a Fernando Gómez Mont, entonces titular de Segob.
El 10 de junio de 2009, un día antes de su renuncia, Correa Méndez autorizó el permiso para Atracciones y Emociones Vallarta. El argumento para dar la autorización fue que se cumplía con la sentencia ejecutada el 11 de diciembre de 2008 por Luis Armando Jerezano Treviño, juez cuarto de Distrito de la Laguna con residencia en Torreón, Coahuila, quien ordenó ampliar el permiso para que Atracciones y Emociones Vallarta pudiera tener autorizados 41 centros de apuestas remotas con salas para sorteos de números.
El ex director general adjunto de Juegos y Sorteos tiene dos denuncias en su contra presentadas ante el Órgano Interno de Control de la Segob, de acuerdo con el oficio UG/TRANSP/013/2011, de la Unidad de Enlace para la Transparencia y Acceso a la Información de la misma dependencia.
Desde que dejó la Dirección General Adjunta de Juegos y Sorteos, Correa Méndez abrió un despacho de abogados que brinda “consultorías y gestiones” a permisionarios y operarios de casinos, aseguran fuentes del sector consultadas por EL UNIVERSAL.
Con esta acción, el ex funcionario violó el artículo 9 de la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos, el cual señala que durante el primer año después de haber concluido funciones, un servidor público no debe aprovechar su influencia u obtener alguna ventaja derivada de la función que desempeñaba. Tampoco puede usar “en provecho propio o de terceros” la información o documentación a la que haya tenido acceso.
En la Secretaría de la Función Pública existen “varias quejas” en contra de Correa. En la dependencia se analiza la posibilidad de abrir uno o varios procedimientos de responsabilidades administrativas, “los motivos y la situación de este caso se encuentran bajo la reserva de ley”, informó la Dirección General de Comunicación Social.
Antes de llegar a la Secretaría de Gobernación, Correa Méndez, licenciado en Derecho por la Universidad Panamericana, trabajó como “profesionista independiente” en un despacho jurídico, de acuerdo con su declaración patrimonial. Nunca antes ejerció algún puesto en la función pública.
Correa Méndez ha sido invitado como ponente a los eventos organizados por la Asociación de Permisionarios, Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juego de Apuesta en México (AIEJA). El vocero de la AIEJA, Miguel Ángel Ochoa, dijo que hace más de dos semanas que no tiene contacto con el ex funcionario.
Un mes después de la renuncia de Correa Méndez, el 27 de julio de 2009, la Segob nombró a María Guadalupe López Mares al frente de la Dirección General Adjunta de Juegos y Sorteos y ésta renunció al cargo el 30 de junio de 2011, después de que la Secretaría de la Función Pública inició una auditoria. También renunciaron tres subdirectores y un jefe de departamento.
En la actualidad, la Dirección General Adjunta de Juegos y Sorteos está a cargo de Araceli Barroso Rodríguez.
El 2 de mayo del 2011, la diputada del PRD, Lizbeth García, denunció ante la Procuraduría General de la República (PGR) a ex funcionarios de la Segob que hayan intervenido en la autorización irregular de permisos para operar centros de apuestas remotas.
Fuente: El Universal