UNA SUCURSAL





Anoche te soñé, San Cristóbal querido
y al despertar quede con el corazón entristecido.

Y es de saber que tu nueva generación nunca sabrá
lo que es por tus calles pasear y ver las puertas abiertas de par en par.
Despertar al sonido del panadero, su canasta pregonar y al mismo tiempo en el aire
respirar el aroma de arepa con coco de Doña Nana .

Hermoso era recibir el saludo lleno de bendiciones que las viejitas vecinas daban
como los de Doña Cristiana, Rosa y Dona Paula
Salir de la casa disparada como un cohete, al encuentro de Chela Franjul y sus roquetes.

Salir Domingo en la noche y por el Intermezzo pasar mientras "Venecia sin Ti" de Charles Aznavour se escuha; llegar a la esquina de la policía y su calle cruzar sin lucha.
Llegar al Parque Central, lugar principal y disfrutar los merengues de la banda municipal.
Y en el parque de los vagos, como una estampa fina, se refleja la sonrisa del primo Manuel Medina, cuya cálida sonrisa a todos, les da la bienvenida.
Dios mío cuanta alegría, cuanto amor allí se repartía, sólo bastaba el cariño sincero de las Hermanas García.

A las diez el Himno Nacional anunciaba: "Se rompió la tasa, todo el mundo pa su casa".
En un ratito queda la esquina vacia, los cocheros en filas y los paleteros recogiendo sus golosinas.
En el silencio de la noche un último movimiento se escucha, son las pisadas apresuradas de los muchachos que de la Padre Ayala pa arriba caminaban,
adiós Dona Estervina, uno de ellos decía…era la voz de Carlos Tobía.

Ya las campanas del reloj público suena, haciéndole competencia a los gallos que unos a otros se contestan.

Oh San Cristóbal! cuantos de tus habitantes hoy día están llorando,
mientras que los que creemos en CRISTO, por ti estamos orando
Pues tenemos la esperanza de volver a ver las cálidas sonrisas de tu gente,
como las sonrisas de Fanny, Dulce y de Carmen Vidal….y es que mi viejo San Cristóbal, en el cielo, tendrá una sucursal!!!!