¿OYES?




¿Oyes acaso el sonido de mi canto?
Escucha….
es como un alegre trinar de pájaros,
una mordaza de caricia,
un vestido de esperanza,
en cada madrugada.
Me iniciaste…
a tañer aleluya.
a vestir al sol con caricias al alba,
quizás este canto encierre un ruego amor…
no quiero que se apague tu risa
asesinando amaneceres con palabras amputadas.
Deja un espacio a este linaje de ilusiones,
a ese paraguas que recoge quimeras,
escucha y protege
este canto que llora nostalgias.




Stella
Todos los derechos reservados
Del poemario de AUSENCIAS Y TIERRA