Uruguay - El fiscal Diego Pérez pidió a la Justicia el procesamiento con prisión del ex intendente Mariano Arana, de la ex secretaria general de la comuna María Julia Muñoz y del ex director municipal Alberto Rosselli.
Quiere que se los indague por coautoría de fraude, concusión y abuso de funciones.
Luego de dos años de investigación que incluyó el testimonio de 60 personas y ocho careos, el magistrado concluyó que los ex jerarcas fueron responsables de dos de los tres delitos que le imputó a Juan Carlos Bengoa y que terminaron con el director de Casinos tras las rejas: delito continuado de fraude y de concusión. También solicitó a la jueza Fanny Canessa que se los procese por un delito continuado de abuso de funciones.
A juicio del fiscal, los superiores a Bengoa, a pesar de su intento por negarlo, estaban al tanto de las maniobras llevadas adelante por el responsable de los casinos municipales.
Por este caso también fueron procesados en diciembre de 2007 los ex asesores de Bengoa, Orestes González y José Luis Antúnez, el ex funcionario municipal Gustavo Dalmonte y el empresario Felipe Ruiz. Fundamentalmente la Justicia los responsabilizó por el cambio de estrategia de negocios por la que se pasó de comprar a arrendar máquinas tragamonedas para los casinos municipales, con pérdidas millonarias para la Intendencia y ganancias para los empresarios.
Además, todas las empresas que pusieron US$ 270 mil para la refacción de obras en el Casino Parque Hotel resultaron seleccionadas por la IMM para arrendar directamente slots.
Fraude y concusión
A juicio del fiscal Pérez, resultó clave para pedir coautoría de estos delitos una nota que figura en el expediente de agosto de 2002, en la que Bengoa informa a sus jerarcas de la nueva estrategia de negocios basada en el arrendamiento de tragamonedas.
Si bien los ex jerarcas municipales aseguraron que nada sabían de las decisiones tomadas por Bengoa, a juicio de la Fiscalía esa nota confirma que conocían la maniobra, y que cooperaron con ella en perjuicio de la administración. En esa nota, Bengoa también menciona la refacción del Casino Parque Hotel y la licitación que se llevaría a cabo posteriormente.
De ahí devendría, a juicio del fiscal, la coautoría del delito de concusión. El fiscal entendió que los jerarcas favorecieron la estrategia por la cual quienes pusieron dinero en la “colecta” para las obras del Parque Hotel luego salieron beneficiados con la contratación directa.
A lo largo de la indagatoria judicial, Arana, Muñoz y Rosselli insistieron en que desconocían las obras. Arana declaró en marzo de 2009 –en el careo con Bengoa– que se enteró de las obras poco antes de la inauguración y que desconocía que se hubieran llevado a cabo con la colaboración de los empresarios. Además, definió esa obra como “minúscula” con relación a otras y que por lo tanto no se trató en las reuniones que el intendente mantiene con sus directores.
Abuso de funciones
El fiscal Pérez quiere que se los procese, es decir, que se los investigue por un nuevo presunto delito: abuso de funciones. Pérez entiende que hay dos resoluciones adoptadas por Arana, con participación de Muñoz y Rosselli, que confirman que ordenaron actos arbitrarios en perjuicio de la IMM.
La primera es la adjudicación de dos máquinas marca Sigma Japón con una ganancia del 50% para el empresario Carlos Mautone, titular de esas máquinas. Mautone fue el único empresario que no puso dinero para la colecta.
Según el fiscal, quedó probado que Bengoa no tuvo participación en la asignación de esas máquinas. La resolución fue firmada por Muñoz. Luego se supo que Mautone se reunió con Arana y el intendente le ofreció esa ganancia.
Esa resolución de diciembre de 2001 lleva también la firma de Rosselli. En ese momento Bengoa no había asumido la responsabilidad de los casinos, cargo que desempeñó a partir de 2002.
La Fiscalía señaló como parte del abuso de funciones la decisión de la IMM de aumentar las ganancias al Hotel Oceanía en 10%, que debían ser entregadas a Carmitel.
Durante el careo con Muñoz, Bengoa declaró que la IMM negoció con Carmitel para que retirara el recurso que presentó contra la instalación de la sala de juegos en el Oceanía. Bengoa, acompañado del secretario de Arana, Mario Areán, negoció ese incremento con el titular del Oceanía, Everly Rodríguez. Según Bengoa, lo hicieron a pedido de Arana, pero éste lo negó.
Autor: Natalia Roba
Fuente: El Observador